Svana Rogalla, de la universidad de Gante (Bélgica), acaba de publicar un interesante artículo científico, sobre las águilas pescadoras de Urdaibai, resultado del proyecto de recuperación del Urdaibai Bird Center.
El águila pescadora es una rapaz migratoria que se encuentra por todo el mundo. Las águilas pescadoras jóvenes de Urdaibai realizan una migración increíblemente larga, que les lleva desde el País Vasco a Senegal. Al cruzar el desierto del Sáhara, se enfrentan a temperaturas ambientales extremadamente altas. Como las aves no pueden sudar como los mamíferos, dependen de otros mecanismos para evitar el sobrecalentamiento. Para comprender cómo estas águilas pescadoras jóvenes se enfrentan al estrés térmico, utilizamos una cámara térmica y medimos las temperaturas de la superficie de las aves jóvenes en la torre de hacking. Las mediciones de temperatura de la superficie pueden ayudarnos a comprender los mecanismos de intercambio de calor. Por ejemplo, una superficie más fría que el entorno que las rodea gana calor, mientras que una superficie más caliente lo disipa. Las imágenes térmicas de las águilas pescadoras mostraron que el pico, las patas y las garras siempre estaban más calientes que el aire circundante, lo que indica que esas partes del cuerpo sirven como áreas de disipación de calor.
Las grandes patas y garras jugaron un papel más importante en el intercambio de calor total de las aves que el pico, que es de tamaño más pequeño. Sorprendentemente, las imágenes térmicas revelaron que algunas águilas pescadoras desarrollaron una franja más fría en la cabeza a altas temperaturas ambientales, probablemente indicaciones de un mecanismo de enfriamiento basado en la evaporación del agua a través de la piel. Observaciones de comportamiento revelaron que las águilas pescadoras jóvenes evitaban el sobrecalentamiento jadeando o abriendo sus alas para disipar el calor corporal del lado ventral menos aislado.
Aprender sobre las estrategias de cómo afrontan el calor aplicadas por las águilas pescadoras puede mejorar nuestra comprensión de cómo estas aves pueden hacer frente a temperaturas ambientales extremadamente altas, por ejemplo, al cruzar el desierto del Sahara. Además, podría ayudar a entender de cómo las águilas pescadoras podrían soportar al aumento de las temperaturas y las olas de calor más frecuentes que vendrán junto con el cambio climático.
Si deseas obtener más información sobre los mecanismos de intercambio de calor en las águilas pescadoras, puedes consultar el artículo publicado, que estará disponible durante 50 días para su visionado público: https://authors.elsevier.com/a/1cTci15hXu4iKp
Desde el Urdaibai Bird Center nos alegra de que proyectos como el de recuperación del águila pescadora de Urdaibai aporten información para estudios tan interesantes como éste, tan importantes para comprender cómo funciona el medio que nos rodea.
|